Probablemente si el lector ha respondido de manera inmediata a la pregunta que cuestiona el título del presente artículo, va a comprobar enseguida que al menos parte importante de sus respuestas con mucha probabilidad coinciden con el conjunto de ciudadanos.
Y es que los sectores que lideran en nuestro país las reclamaciones por parte de los usuarios se mantienen inamovibles en el pódium desde hace años, aunque, eso sí, algunos de ellos creciendo de manera exponencial como es el caso de la banca, pero vayamos por partes.
El reciente balance de la asociación de consumidores FACUA que hace referencia precisamente a las reclamaciones presentadas durante el año 2013, como decíamos no presenta grandes novedades en el liderazgo de aquellos sectores con mayor volumen de reclamaciones que siguen siendo, por este orden; las telecomunicaciones, la banca y la energía.
De hecho, para hacernos una idea más concreta de este liderazgo como acaparadores de mayor número de reclamaciones, baste con decir que estos tres sectores acumulan el 70% de las reclamaciones cursadas durante el pasado año por esta asociación.
Sobre un volumen de reclamaciones superior al del año 2012, concretamente con un 9% más que en dicho año, prácticamente un tercio de dichas reclamaciones se corresponden de manera directa con los servicios de telefonía, ostentando como decimos un liderazgo indiscutible con el 32,3% de las reclamaciones, y donde, la falta de cumplimiento de las ofertas comerciales, la facturación post baja de contrato y los problemas derivados de los intentos de bajas de contratos y compromisos de permanencia son el eje fundamental de reclamaciones, aunque, no podemos olvidarnos otros clásicos como las llamadas no realizadas o los productos no contratados y facturados.
Es cierto que el sector de telecomunicaciones ha reducido el pasado año algo menos de tres puntos de porcentaje con respecto a 2012 (35,1%) y sin embargo el sector bancario crece en este año pasado 2013 de manera espectacular en lo que reclamaciones tramitadas se refiere, nada menos que un 11% más que en 2012 y se coloca con el 27,3% de reclamaciones dentro del total; crecimiento llamativo si tenemos en cuenta que en el año 2011 el volumen de reclamaciones en este sector se sitúa en torno al 7,8%.
Tampoco sorprenden los motivos de reclamación a la banca; comisiones no adecuadas y cláusulas abusivas en contratos de préstamos tanto al consumo como hipotecarios son las más destacables aunque no las únicas.
El tercer puesto en la lista de reclamaciones constatado por FACUA se le lleva, de nuevo, el sector de la energía. En este caso con el 8% de las reclamaciones (algo menos que en el año 2012) y donde los dos ejes principales de reclamación son las facturas emitidas tras falta de lectura en contadores y que resultan tremendamente altas y las ofertas comerciales engañosas.