Las entidades financieras españolas están realmente preocupadas por la pérdida de beneficios que están acumulando como consecuencia de la caída en la concesión de hipotecas, no ya tanto por las hipotecas en sí, que también, sino más por la caída en la venta cruzada de otros productos financieros que se comercializaban junto a las hipotecas.
¿Qué otros productos formaban parte de la venta cruzada de las hipotecas?
1. Seguros: Los seguros de hogar, de vida, de desempleo, etc. Todos ellos generaban una prima que iba directamente a la cuenta de resultados de las entidades financieras, generando unos ingresos adicionales al final de cada ejercicio, garantizando un incremento exponencial en los beneficios de la entidad financiera.
2. Tarjetas de crédito: Casi todas las hipotecas bonificaban la contratación de tarjetas de crédito, con lo que los clientes no lo dudaban a la hora de caer en ellas y contratar una o más tarjetas, para ahorrarse algo en el diferencial. Ello generaba comisiones por tenencia y por utilización que incrementaban los beneficios de los bancos y cajas.
3. Planes de pensiones: O bien bonificaban el diferencial con la contratación de un plan de pensiones, o bien regalaban uno al contratar la hipoteca. De esa forma empaquetaban un nuevo producto financiero al cliente con beneficios para la entidad en el largo plazo, ya que los planes de pensiones generan un dinero que se mantiene en el banco por largo plazo.
4. Cuentas corrientes: A través de ellas se conseguía que el cliente quedara vinculado a la entidad, y con ello se generaban ingresos en el largo plazo.
Pues bien, ahora, con la caída de la concesión de préstamos hipotecarios, todas estas ventas cruzadas han empezado, a su vez, a decaer, generando un cómputo general de pérdida en las entidades financieras que les lleva de cabeza.
