La contratación de un préstamo hipotecario es, probablemente, una de las decisiones financieras más importantes que han de afrontar las familias, no sólo por el volumen de deuda contraído sino también por el tiempo que dura el compromiso y por tanto, los riesgos que ello conlleva. Uno de los más importantes, sin duda, el riesgo de tipo de interés.
La sensibilidad de los hogares ante variaciones al alza de los tipos de interés puede tener consecuencias muy importantes para la estabilidad financiera, tal como demuestra para el caso español el periodo de 2006-2008 cuando inició la crisis inmobiliaria. Ante esta circunstancia, se hace más necesario que nunca trasladar de la forma más clara y pedagógica posible la realidad de estos riesgos estructurales y la conveniencia de protegerse frente a ellos, es por eso que a continuación explicaremos el Derivado Financiero.
El Derivado Financiero se trata de otro método de cobertura del riesgo de tipo de interés independiente al contrato hipotecario, que limite este riesgo. Es importante que conozca con la mayor claridad cómo funcionan estos instrumentos para que usted conozca todas sus ventajas y sus riesgos, y pueda tomar una decisión formada.
Comercialización:
Los derivados financieros utilizados como instrumento de cobertura son un producto diseñado para eliminar incertidumbre en la figura del préstamo hipotecario a tipo de interés variable durante un período de tiempo determinado.
El resultado neto para el cliente es: o una limitación de la variación del tipo de interés del préstamo; o bien un cambio en la estructura de su financiación, pasando de un tipo variable a uno fijo.
El motivo principal de utilizar esta clase de productos para limitar total o parcialmente la variabilidad de los tipos de interés es el de evitar el coste extra que supone la novación de las condiciones de la hipoteca que permiten pasar de tipo de interés variable a fijo.
Asimismo, tanto para la entidad como para el cliente este tipo de productos otorgan una mayor flexibilidad comercial – se pueden adaptar mejor en tiempo y forma a las necesidades del cliente y circunstancias coyunturales- y suponen un menor número de trámites.
Tipología de productos más utilizados:
Swap de tipo de interés o IRS (Interest Rate Swap): El swap de tipos de interés o IRS permite al cliente protegerse de las subidas de los tipos de interés mediante un intercambio periódico de flujos sobre el nominal de la hipoteca entre el cliente y el banco, de forma que:
El cliente liquidará periódicamente el Euribor contratado
Collar de tipos de interés: Este tipo de cobertura permite que el tipo de interés que paga el cliente oscile libremente dentro de una horquilla de valores hasta unos límites máximo y mínimo establecidos previamente, limitando por tanto la variación de los tipos a una banda de fluctuación determinada
CAP: La cobertura vía CAP funciona como la contratación de un seguro que cubre al cliente ante posibles alzas en los tipos de interés y tiene la ventaja de ser un producto fácilmente comprensible.