Sin duda el momento en que cuando hablamos de hipotecas, prácticamente siempre, tenemos que referirnos a un proceso de endurecimiento en el cual las condiciones de concesión cada vez son más complejas, resulta interesante encontrarse con propuestas que al menos, desde la perspectiva del usuario, abren opciones que parecían ya cerradas a cal y canto.
Esto puede ser el caso de la Hipoteca Sin Más Bankinter, un préstamo hipotecario que podemos encontrar en la propia página web de la entidad, y que atrapa nuestra atención desde el primer momento con un mensaje claro; la garantía de esta operación será la propia vivienda, nunca otros bienes del contratante.
A partir de este punto, nos encontramos con un préstamo hipotecario variable, referenciado a Euribor, y con unas características muy concretas.
En el apartado de intereses el primer año el producto nos mostrará un tipo de interés fijo a 4,5%, para el resto de vida de la hipoteca se nos plantea un tipo de interés variable compuesto de Euribor más diferencial, este diferencial va a poder ser modificado con el usuario con modificaciones a partir de la contratación de productos en paralelo, algo habitual, en este caso los productos que se nos proponen como aporte de bonificación si se contratan, son, seguro de hogar, seguro de vida, y cuenta nómina o cuenta profesional.
Para un importe mínimo de 30.000 € a financiar, y máximo de 600.000 €, la hipoteca alcanzará como máximo la financiación del 80% del valor de tasación de la vivienda, que puede alcanzar el 100% si la vivienda es adquirida en el portal inmobiliario de la entidad. El plazo de amortización máximo de 40 años sólo podrá ser solicitado por menores de 35 años, sin embargo, para mayores de esta edad, el plazo de amortización tampoco disminuye mucho, ya que se sitúa como máximo en 35 años.
En el apartado de comisiones encontraremos una comisión del 1% de apertura, y si bien no vamos a tener comisión de amortización parcial, si se nos aplicara una comisión amortización total o subrogación a otra entidad, que será del 0,5% en los cinco primeros años y, para el resto de años, del 0,25%.