Tras la crisis económica causada por la llegada de la pandemia a nuestro país, de nuevo parece que los usuarios vuelven a invertir en vivienda. Aunque, eso sí, se trata de una operación que se está recuperando lentamente.
Si queremos invertir en vivienda y tener éxito con nuestra inversión, es primordial saber analizar los precios para poder identificar el mejor método de pago y de esta manera poder hacernos con la mejor oferta hipotecaria, que disponga de una buena previsión de gastos y efectos fiscales, además de una buena revalorización.
Valorar bien la inversión en vivienda
Antes de realizar cualquier tipo de inversión, primero debemos valorar nuestra situación económica. Sólo por medio de la valoración real de nuestras finanzas, vamos a poder determinar las posibilidades que tenemos realmente para poder comprar la vivienda que queremos. En este sentido, es muy importante no dejarse llevar por las emociones o por la oferta que se nos ofrezca, ya que no sabemos si en un futuro nuestra situación puede empeorar y acabar sin poder hacer frente al pago de la hipoteca, por ejemplo.
Por lo tanto, es imprescindible valorar si la vivienda que tanto queremos se encuentra a nuestro alcance económico y, de no hacerlo, lo más adecuado sería continuar nuestra búsqueda hasta dar con la que mejor se adapte a nuestra situación y necesidades.
Claves para invertir en vivienda
La primera de las claves a tener en cuenta para poder invertir en una vivienda y tener éxito en nuestra operación, es llevar a cabo un correcto análisis respecto a las opciones de revalorización de la vivienda. El precio es, sin duda alguna, un factor clave para decidirnos en cualquier compra, especialmente en la de una vivienda. Además, debemos tener en cuenta el tipo de revalorización que tendrá dicha vivienda a corto, medio y largo plazo, para saber si nos interesa adquirirla o si podemos encontrar una mucho mejor.
No es una tarea fácil encontrar una vivienda a un precio económico y que además disponga de un gran potencial de revalorización, y cuando se da una oferta de estas características, los inversores más experimentados suelen ser los primeros en hacerse con ella. Ojo, esto no quiere decir que no podamos encontrar una vivienda que se ajuste a nuestras expectativas y necesidades, solamente debemos ser realistas y tener en cuenta que ese tipo de ofertas no abundan y hay que saber buscar para encontrarlas.
Cuando el valor de una vivienda que nos interesa nos parezca demasiado elevado para la zona en la que se encuentra, lo que debemos hacer es comparar ese precio con el resto de viviendas que podemos encontrar por la zona, para realmente confirmar o desmentir si es mucho más cara de lo que debería. Valorar la revalorización ya es un tema mucho más abstracto, porque depende del tipo de vivienda que adquirimos, su evolución, la zona en la que se encuentra, la evolución de dicha zona, etc.
La segunda clave a tener en cuenta para poder invertir en vivienda, es saber acertar con la elección de la hipoteca. Es decir, si por ejemplo queremos adquirir la vivienda para vivir en ella un tiempo, resulta muy importante dar con una buena hipoteca, pero esto lo es aún más si queremos invertir en ella. Esta tampoco es una tarea sencilla dada la situación en la que se encuentra el mercado de la vivienda a causa de la crisis económica por la pandemia, pero que no sea fácil no implica que se trate de una misión imposible.
Dependiendo de nuestras necesidades y nuestro nivel económico, nos podremos decidir entre una hipoteca de tipo variable o una de tipo fijo. A día de hoy, los tipos de interés variable resultan mucho más bajos debido al tipo de Euríbor, que en los últimos años apenas ha experimentado gran variación.
Por el contrario, las hipotecas de tipo variable han cambiado notablemente, como consecuencia de la bajada en los tipos de interés y por la relajación que se ha dado en cuanto a la exigencia de las condiciones.
La tercera y última clave para invertir en vivienda, es tener en cuenta los gastos que va a generar la comunidad. Hasta el momento, se ha valorado el tipo de hipoteca y el gasto que vamos a asumir al invertir en ella, pero no se han tenido en cuenta otro tipo de gastos que también resulta muy importante conocer antes de realizar una inversión de estas características.
Hay que tener en cuenta los gastos de comunidad, ya que si no nos informamos debidamente sobre ellos, corren el riesgo de convertirse en un problema económico importante. Si estos resultan ser muy caros, suponen un coste de la inversión mayor del que esperábamos en un primer momento, y por tanto es posible que no nos acabe convenciendo y terminemos declinando la compra.
