Tras el leve respiro que brindó el rubro en el primer mes del año, la crisis volvió a dar indicios de que aún no ha concluido. Es que los préstamos otorgados para la adquisición de viviendas sufrieron una caída del 4.11% en comparación con la temporada anterior.
Este descenso no hace más que remarcar el problema que en la actualidad posee el sector crediticio español, ya que no solamente afecta al mercado del ladrillo, sino que además trae aparejado a las compras de consumo. La bajada mencionada representó una disminución de aproximadamente 200 millones de euros, pasando de 5.286 millones en Enero a 5.083 millones en el segundo mes de 2010.
En el caso de las empresas, los nuevos créditos inmobiliarios alcanzaron los 57.163 millones de euros, un 16% menos que hace un año, mientras que el saldo total alcanzó en febrero 911.930 millones, con un descenso del 4,14%.
Como sucede desde hace ya un largo tiempo, las cajas continúan siendo la fuente de mayor confianza en cuanto a la tramitación de financiaciones a familias para la compra de un hogar. En total estas entidades financieras contabilizaron 2.518 millones de euros destinados a este fin.
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