El Euribor ante la última bajada de tipos

 
En la última reunión del BCE Jean-Claude Trichet decidió mantener los tipos en el 4,25% pero dejó abierta la puerta a una posible bajada en octubre. Sin embargo, esta se ha producido antes de lo esperado. El salto de la crisis a Europa y la inestabilidad del mercado financiero durante toda esta semana junto con las espectaculares caídas bursátiles han llevado al organismo europeo a tomar medidas extraordinarias y bajar los tipos de interés 0,5 puntos porcentuales. En realidad se trata de una acción conjunta que ha sido llevada a cabo junto con la Fed estadounidense y el Banco de Inglaterra en lo que se considera ya un recorte de tipos mundial.

El recorte de tipos del BCE supone la primera rebaja en más de un año y deja el precio del dinero en el 3,75%. En teoría, esta acción debería servir para tranquilizar a los mercados, devolver la confianza a los inversores y sobre, todo, calmar las tensiones del mercado interbancario. Tradicionalmente el Euribor ha ‘cotizado’ un punto por encima del tipo de interés del BCE, pero las últimas tensiones han distanciado ambos índices. Hay que recordar que el euribor no es sino el tipo de referencia al que se prestan dinero los bancos y que en su composición influyen tanto los tipos de interés oficiales como la disposición de los propios bancos prestarse dinero entre sí (prácticamente nula en este momento).

Desde el estallido de la crisis el euribor se ha disparado como consecuencia de la falta de liquidez (dinero en efectivo) de los bancos. A esto hay que añadir la tensión por las últimas quiebras-rescates en el Viejo Continente. De hecho, el euribor sólo comenzó a bajar tras intuirse el aumento de garantías de depósito en Europa y la intervención de los diferentes gobiernos comunitarios.

En teoría, el recorte del BCE debería hacer caer al índice, ya que permitirá a los bancos pedir dinero al organismo europeo a menor precio, lo que a su vez deberia abaratar el interés que se cobran entre ellos por pedir dinero. Al final es posible que el gráfico del euribor se convierta en una moderada cuesta abajo en octubre, aunque tal y como está el mercado es difícil asegurarlo.

En caso de no producirse nuevos sobresaltos, el euribor debería caer medio punto durante este mes y cerrar en torno al 5%. De esta forma el coste de la hipoteca subiría con respecto al año anterior aunque no tanto como estaba previsto a principios de mes. Si no se cumplen las prescripciones teóricas y el euribor se mantiene en los niveles actuales del 5,498% se auguran complicaciones de pago para quienes actualicen su hipoteca este mes

El fondo de 30.000 millones de euros creado por el Gobierno también jugará a favor del abaratamiento de la hipoteca, así como otras medidas de diferentes gobiernos europeos. Y es que el Ejecutivo inyectará hasta 50.000 millones en el mercado en forma de préstamos a cargo del Tesoro para que las entidades españolas dispongan de dinero líquido. Así, las entidades españolas no tendrán tanta necesidad de acudir al mercado interbancario. A esto se pueden sumar nuevas rebajas del precio del dinero, siempre y cuando el BCE constate que siguen sin crecer las tensiones inflacionarias, algo más que probable.

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