La Asociación Hipotecaria Española (AHE) ha publicado esta semana los datos sobre el saldo hipotecario sostenido por las entidades financieras en este pasado mes de mayo, unos datos que reflejan un descenso histórico del 3,93%, para acumular un total de 1,051 billones de euros, y acumulando un descenso en lo que va de año del 2,34%.
Esta reducción del saldo hipotecario viene producida por un doble movimiento, por un lado se ha producido una reducción de la oferta de créditos por parte de las entidades financieras, exigiendo requisitos más rigurosos a sus clientes, y, por otro lado, una reducción de la demanda, ya que los ciudadanos no pueden permitirse solicitar estos préstamos hipotecarios, especialmente con los datos de desempleo que se siguen dando mes a mes, a pesar de la recuperación estacional del verano.
En términos absolutos el descenso total asciende a 43.066 millones de euros, lo que supone el mayor descenso histórico de este valor desde el año 1992, justo al comienzo de la última gran crisis económica que sufrió nuestro país.
No hay que olvidar que el saldo hipotecario crecía a un 20% anual a finales de la burbuja inmobiliaria, justo antes de su estallido final en el año 2008, con lo que en términos relativos se observa una disminución significativa en este valor.
Por otro lado, el descenso del saldo hipotecario no es necesariamente negativa, ya que una de las principales causas de la tremenda crisis que seguimos viviendo fue el excesivo endeudamiento privado de las familias españolas, y esta reducción del saldo hipotecario significa que, poco a poco, la situación se va revertiendo.