Según el último boletín del Observatorio Joven de Vivienda del Consejo de la Juventud Española, referente al cuarto trimestre de 2010, los jóvenes españoles necesitan el 51,9% de su saldo neto para poder hacer frente al pago de una hipoteca media, y, por tanto, plantearse la adquisición de una vivienda.
En cuanto al desglose por provincias, Vizcaya aparece como la provincia que exige un mayor esfuerzo de los jóvenes para adquirir una vivienda, con el 68% de su sueldo neto, seguida de cerca por Barcelona, con un 67,1%, Guipúzcoa, con un 66,3%, Baleares con un 63,1%, Madrid, con un 61,5%, Cantabria con un 57,4% y Málaga con un 55,4%.
Por otro lado, las provincias por debajo de la media nacional fueron Teruel, con un 29,5%, Cuenca y Ciudad Real, con un 32,1%, Cáceres, con un 32,2%, Badajoz, con un 33,1%, Lugo, con un 34,8% y Lleida con un 36.6%.
En cualquier caso, todas las provincias españolas, salvo Teruel, arrojaron unos datos por encima del mínimo recomendado por las entidades financieras, que se encuentra en el 30% del salario neto, lo que pone bien a las claras las dificultades de los jóvenes españoles para plantearse la adquisición de una vivienda.
De hecho, una de las principales reivindicaciones de todos los movimientos que están tomando las calles estas últimas semanas es la del cumplimiento del derecho constitucional que todo ciudadano tiene a una vivienda digna, algo que, como se ve, no se está cumpliendo en la mayoría de los casos.