Es un hecho que, desde que la burbuja inmobiliaria nos estalló en la cara, los españoles cada vez tenemos más miedo a la hora de comprar una vivienda, y pese a que los precios hayan caído en porcentajes considerables desde el inicio de la crisis, también las condiciones económicas de las familias han empeorado sensiblemente, al igual que se ha complicado el acceso al crédito por medio de las entidades financieras.
Todos estos factores han llevado a un descenso importante en el número de operaciones de compraventa de viviendas que se ha llevado a cabo desde 2006. No obstante, las necesidades de los ciudadanos han ido evolucionando en este tiempo, y las circunstancias de muchas familias han cambiado. Es posiblemente por este hecho que, por primera vez desde el recrudecimiento de la crisis, se haya registrado un aumento en el número de solicitudes registradas en el Ministerio de Fomento para acometer reformas en la vivienda.
Los certificados para rehabilitación de viviendas en enero de 2014 supusieron un total de 1.649, un 7% más que los permisos que se solicitaron el mismo mes del año anterior, cuando se registró el mínimo histórico de peticiones para hacer reformas (teniendo en cuenta que solo se disponen datos desde el año 2000). Así, por las 1.540 solicitudes presentadas en enero de 2013, en el mismo mes de este año se han tramitado hasta 1.649 permisos para reformar viviendas. Con esta cifra se rompe una trayectoria descendiente que duraba ya tres años.
No obstante, continúa cayendo el número de instancias que se presentan ante Fomento solicitando autorización para realizar una ampliación de la vivienda, algo que, además de tener relación con la crisis, también se debe a los cambios sociodemográficos experimentados en las familias en las últimas décadas. De hecho, en el último año se ha reducido en un 26% esta cifra, hasta quedarse en solo 120 peticiones.
Con la nueva Ley de Rehabilitación, Regeneración y Renovación Urbana y el Plan Estatal de Alquiler de Vivienda y Rehabilitación 2013-2016, el Ejecutivo central se plantea como objetivo ofrecer ayudas para estas acciones y fomentar de este modo las reformas en los hogares.