El sindicato UGT ha comenzado a plantear alternativas para la legislación hipotecaria de manera que acaben por defender los intereses de los ciudadanos, que suelen ser los más perjudicados en todas las modificaciones previstas.
De esta manera, UGT, desde su sede madrileña, ha solicitado al Gobierno que limite el máximo capital concedido en las hipotecas al 75% del valor de tasación de los inmuebles, de manera que ningún ciudadano se vea sumido por las deudas.
De la misma manera, y para evitar una carga de intereses excesiva, así como que se relaje la cuota mensual inicial, pudiendo incitar a los ciudadanos a lanzarse a la contratación de la hipoteca, también ha pedido que el máximo de años de las hipotecas se limite a 25.
Por supuesto, no ha querido olvidarse de la cuestión fundamental en todas las reivindicaciones hipotecarias por parte de los ciudadanos y de las partes menos favorecidas, como es la dación en pago, que, según UGT debería de estar presente en la legislación desde ya, para permitir que las familias en dificultades puedan comenzar una nueva vida sin cargas adicionales.
Y, por último, ha pedido a las administraciones que sean capaces de discernir los casos de impago voluntario de los forzados. Es decir, los casos de aquellas personas que no pagan sus deudas por el mero hecho de no pagarlas, y los de otras personas que se han visto obligados a no poder pagar por circunstancias sobrevenidas.
